Cómo hacer una habitación de obra seca, con ventanales reciclados

Nuestro amigo Nacho, integrante de la cooperativa Garua, y promotor del espacio de (coopworking) "El faenero", tenía ganas de que Supermanitas colaborara con su proyecto ayudando en la construcción de la sala de reuniones. 
Raquel, la arquitecta del faenero, amiga, colaboradora y madre del proyecto hermano y vecino "El Arenero" era nuestra fan, y Supermanitas colaborador y padre del grupo de crianza vecino y hermano"El Palomar",  y así estábamos todos interrelacionados creando y fomentando comunidad y colaboración.

Estas son las ventanas que encontró Raquel que estaban desmontando en una obra, y que iban a ir a la basura. Son unas ventanas preciosas de madera maciza que estaban acristaladas con unos vidrios translúcidos antiguos. 


Lo primero fue sacar los vidrios para limpiar las estructuras de madera, lijar, pintar y sanear.
una vez extraídos los cristales vino el turno de la limpieza con agua a presión. las maderas tenían una capa de suciedad importante, con la que se habría hecho muy engorroso el lijado. una buena limpieza antes de trabajar es buena cosa.





 Aquí tenemos a Pablo, amigo indispensable, limpiando y ayudando.
 La siguiente fase consistió en lijar el plano superficial de la estructura de madera, se hizo un lijado no profundo sino mas bien superficial el objeto de este no era dejar la madera  completamente limpia de pintura, sino dejar la superficie bien preparada para poderla luego pintar a gusto.

Una vez pintadas las estructuras de las ventanas, se construyeron unas estructuras metálicas a medida que ayudaran a montar las paredes de la futura sala de reuniones. Para hacer estas estructuras utilicé las propias ventanas como molde o matriz a las que adaptar los tubos cuadrados de hierro de 40x40 cortados a medida,
y construir así unos paneles que se adapten a la perfección



Aquí tenemos el espacio vacío y preparado para montar la sala de reuniones.
-Este es uno de los paneles prefabricado en taller y llevado al lugar definitivo, en el que se instalaría ventana se forraría el resto con "cartón-yeso".
Por la parte de abajo se atornillaría al suelo y por un lateral se soldaría al pilar preexistente en el local a intervenir.





Lo siguiente es montar y atornillar a la estructura de hierro creada, la ventana correspondiente.
















































Luego seguimos montando el resto de la estructura, colocando la puerta en su lugar y poco a poco cerrando el espacio definitivo.
Aquí tenemos a Inés, atornillado al suelo cada una de las piezas dando solidez al conjunto.
































Seguimos montando el resto de ventanas, En esta foto se ve que solo queda acabar montando los paneles de cartón yeso en los espacios que no son ventana ni puerta, 









El cartón yeso es algo muy fácil de trabajar ya que se instala mediante tornillos, y además para los amantes del medio ambiente, digamos que es uno de los productos de construcción con menor huella ecológica.
Se mide con metro y en este caso ayudándote de una regla metálica lo cortamos con cutter, luego simplemente atornillar.







Al final resultó no ser tan fácil lo del cartón yeso, las juntas entre placas tienen su truco, pero bueno, Supermanitas algunas veces es un poco manazas. Ahora estoy pendiente de acabar de reparar las imperfecciones.


























Ya en esta foto se ve como el espacio va cogiendo forma y que va faltando solo un pintado.











Para acabar ya solo faltaba instalar los cristales, que lógicamente hay que colocarlos lo último para evitar roturas durante el montaje.




































Como ultimísimo detalle colocamos en el centro de cada una de las ventanas un cristal antiguo de los que tenían las ventanas previamente





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